Liberar las tensiones corporales es ideal para relajarse, olvidarse de las pequeñas preocupaciones del día, dedicarse un tiempo y facilitar el sueño. Durante una semana, todas las noches, puedes regalarte un momento de tranquilidad de 15 minutos con esta serie de ejercicios a base de estiramientos.
Con esta rutina, también mejorarás la movilidad articular y la flexibilidad muscular. Y si tienes dolor de espalda, es posible que disminuya paulatinamente; lo único que tendrás que hacer es repetir esta rutina durante varias semanas.
¡Que disfrutes de la sesión!
Son unos ejercicios sencillos, accesibles para todos y muy eficaces.
Se trata de tu primera sesión y en ella descubrirás los ejercicios. Tómate tu tiempo y respira profundamente durante el estiramiento.
Limita la amplitud de los ejercicios, ya que un músculo no debe estirarse de repente sin haberlo calentado previamente. El objetivo principal es la relajación, no ganar flexibilidad.
Una lista de reproducción zen es ideal como acompañamiento.
Disfruta del momento :-)
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
Esta primera sesión sirve para descubrir los ejercicios. Retoma siempre la misma sesión para que sientas que progresas.
Aquí está tu segunda sesión: tómate tiempo para hacerte con los ejercicios.
Respira y disfruta :-)
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
¿Tu vestimenta era adecuada y cómoda? Si no, prepárate una para mañana :-)
En esta tercera sesión, puedes empezar a aumentar de forma gradual la amplitud de los ejercicios mientras escuchas a tu cuerpo.
Tómatelo con calma :-)
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
Recuerda hidratarte con agua, un té o una infusión para seguir en este modo de tranquilidad e intimidad.
Una cuarta sesión para focalizar más tu atención en la relajación mental. Usando la respiración, concéntrate y siente los beneficios de cada estiramiento. Puede que algunos ejercicios sean más fáciles que otros. No te preocupes, es normal.
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
Concentrarse es importante, ya que permite encontrarse en el momento presente y disfrutar al máximo.
¡Quinta sesión!
Empiezan a notarse los primeros beneficios: ¿Mejor gestión del estrés, mayor facilidad de movimientos y menos dolores? ¡Perfecto! Sigue así :-)
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
¿La amplitud de los ejercicios era excesiva o insuficiente? Las sensaciones de los estiramientos deben seguir siendo en gran medida soportables. Si tienes dolor, has forzado demasiado.
En las últimas dos sesiones, concéntrate en la relajación física y mental al mismo tiempo. Para ello, sigue respirando profundamente, acompaña el estiramiento con una espiración y fuerza un poco más la amplitud de los ejercicios.
Escucha a tu cuerpo. ¡Disfruta del momento!
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
Recuerda hidratarte con agua, un té o una infusión para seguir en este modo de tranquilidad e intimidad; si empiezas a notar que te entra sueño, puede que sea el momento de irte a dormir.
¡Última sesión de esta rutina!
Te recomendamos que continúes estirando tu cuerpo y que repitas esta rutina todas las noches para tu bienestar físico y mental.
¡Cuídate!
Las claves para una rutina agradable y efectiva: tranquilidad, una respiración sosegada y unos movimientos adecuados. ¡Que lo disfrutes!
¡Enhorabuena! Has finalizado esta rutina de estiramientos. No dudes en repetirla para aumentar tu bienestar.